Montserrat Martínez I Málaga, (EFE).- El aumento de la demanda de trasplantes capilares ha incrementado el intrusismo en el sector, cuyos profesionales han alertado de la existencia de quirófanos ambulatorios alquilados por equipos sanitarios procedentes de Turquía y operaciones ejecutadas por técnicos sanitarios sin la supervisión de un doctor.
Especialistas como el doctor Ezequiel Panno, con clínica en Marbella, han resaltado a EFE el aumento de trasplantes capilares en los que no hay médico, donde las operaciones corren a cargo de técnicos sanitarios o, en el mejor de los casos, de profesionales de enfermería.
Además, desde el Colegio de Médicos de Málaga piden a los posibles clientes que no se «dejen llevar» por precios económicos o publicidad engañosa y que se informen adecuadamente antes de un implante de este tipo.
El doctor malagueño Antonio Burgos, de la Junta Directiva de la Sociedad Española de Restauración Capilar (Serecap), ha afirmado que se detectan cada vez mas clínicas de bajo coste en las que los médicos sólo figuran sin realizar nada del procedimiento, por lo que ha pedido que los pacientes «exijan que sea el médico es que los vea y ejecute el injerto».
Apariencia de legalidad
Panno, especialista en trasplante capilar y terapia regenerativa antialopécica, ha lamentado que en muchas clínicas contratan a un médico para dar apariencia de legalidad, pero en muchas ocasiones se realizan varias intervenciones a la vez, por lo que el facultativo sólo está presente en una o en ninguna de ellas.
«Eso baja los costes. Cuantos menos médicos tienen, más barata sale la cirugía», ha señalado Panno, quien ha destacado que se están alquilando quirófanos ambulatorios para hacer una cirugía más económica y competir, espacios que en ocasiones están en pisos.
Hay auxiliares de enfermería y empresarios ajenos al ámbito sanitario que están abriendo clínicas, según ha denunciado.
El «truco» consiste en lograr que el médico firme que va a trabajar allí, aunque luego no esté presente o solo lo haga de manera ocasional, por lo que Panno pide hacer un seguimiento a estos centros para comprobar que cumplen la normativa.
Profesionales de la medicina
Ha lamentado que «cualquiera», sin tener conocimientos médicos, puede abrir una clínica capilar, lo que «es un horror».
En España, los trasplantes capilares son competencia de los profesionales de medicina y la técnica mayoritaria que se utiliza es la Follicular Unit Extraction (FUE), que consiste extraer e implantar folículos pilosos. Esta técnica tiene que estar supervisada y realizada por un médico, ha recordado a EFE el presidente del Colegio de Médicos de Málaga, Pedro Navarro.
Sin embargo, Panno ha insistido en que cada vez son más los auxiliares de enfermería o enfermeros, en el mejor de los casos, los que están realizando los trasplantes. «Dejan cicatrices y los resultados son mediocres o incluso muy malos», ha aseverado.
En los últimos diez años este doctor ha observado un aumento de las personas que acuden a su clínica para intentar hacerse una reconstrucción tras un mal trabajo: «antes me venían de Turquía, pero en los últimos cinco años son de Europa y España».
Este especialista, fundador del centro de trasplantes de cabello ‘Hair Transplant Clinic’, ha explicado que Estados Unidos e incluso Turquía ya están regulando los problemas que hay en esta materia y ha opinado que España debería actuar antes de que haya alguna víctima mortal.
No dejarse llevar por el bajo coste
Por su parte, Pedro Navarro ha señalado a EFE que hay que advertir a las personas para que «no se dejen llevar por precios económicos o publicidad engañosa y que se informen bien antes de someterse a un implante capital».
«Hay que consultar en el centro qué medico le va a realizar la técnica y, posteriormente, comprobar que está colegiado y tiene la formación que le habilita para realizar dicho implante», ha subrayado Navarro, quien ha aconsejado llamar a los Colegios de Médicos o consultar con la Organización Médica Colegial (OMC), que dispone de un registro público de colegiados.
El doctor Carlos Fajardo, director de la Clínica Fajardo, con sede en Málaga, ha explicado a EFE que efectivamente están aumentando las clínicas en la que varios técnicos o empresarios ponen un centro y para ello «ponen el título de un médico que hace poquito o nada» mientras son los auxiliares los que realizan los trasplantes capilares.
«Estos empresarios -ha lamentado Fajardo- contratan un médico para poder poner el título en la clínica pero, como trabajan a bajo coste, es más barato pagar a dos técnicos y que sean ellos los que hagan el trasplante. Está en auge, pero no es legal», ha insistido.
Este especialista ha lamentado «la impunidad» con la que trabajan y la publicidad engañosa, con precios muy atractivos.
«Es cierto que si hay una inspección van a comprobar que trabajan con un médico, pero la realidad es que, como van a bajo coste, tienen varias salas y hacen dos o tres cirugías a la vez y el médico no puede estar en todas y, en ocasiones, en ninguna», ha advertido Fajardo. EFE
