Vista de la exposición 'Goya. Grabado en la retina. La influencia de los grabados de Goya en el cine y en el audiovisual', en Zaragoza. EFE/Javier Cebollada

‘Goya. Grabado en la retina’ repasa cómo el pintor se anticipó a la llegada del mundo audiovisual

Zaragoza (EFE).- La exposición ‘Goya. Grabado en la retina. La influencia de los grabados de Goya en el cine y en el audiovisual’ repasa cómo el genio de Fuendetodos reflejó la sociedad de su época y cómo después el mundo audiovisual ha recogido sus poderosos mensajes y simbolismos.

Goya intuyó la llegada de las imágenes en movimiento en sus obras, que se produjo casi 70 años después de su muerte, y el cine tomó su obra, principalmente los grabados, como fuente de inspiración que ha quedado reflejada en innumerables películas, series o videocreaciones, entre otras.

El director general de Cultura, Pedro Olloqui, junto al comisario de la exposición, Fernando Sanz, profesor del Departamento de Historia del Arte de la Universidad de Zaragoza, y el director del IAACC Pablo Serrano, Julio Ramón, han presentado este martes esta exposición impulsada por la Fundación Goya en Aragón que se podrá contemplar hasta el próximo 19 de octubre en la Galería Acristalada de este centro zaragozano, reacondicionada en esta ocasión en un espacio de recogimiento.

Vista de la exposición 'Goya. Grabado en la retina. La influencia de los grabados de Goya en el cine y en el audiovisual', en Zaragoza.
Vista de la exposición ‘Goya. Grabado en la retina. La influencia de los grabados de Goya en el cine y en el audiovisual’, en Zaragoza. EFE/Javier Cebollada

La muestra presenta diferentes imágenes de las series de grabados de los Caprichos, los Desastres, la Tauromaquia o los Disparates, junto a la espectacular ‘Crucifixión’ de Antonio Saura y diferentes monitores en los que se pueden ver pasajes de grabaciones en las que se refleja la obra gráfica del pintor de Fuendetodos.

El artista más “cinematográfico”

Sin duda, Francisco de Goya es, como han incidido en la presentación Olloqui, Sanz y Ramón, el artista más “cinematográfico” de toda la Historia del Arte, y el que ha tenido una mayor presencia en el ámbito audiovisual, por ser precursor de diferentes temáticas y técnicas que serán tratadas en el arte posterior a él.

Olloqui ha resaltado que en la muestra se relacionan una selección de grabados que conviven «con imágenes audiovisuales del cine contemporáneo» para observar esta influencia de Goya en la producción audiovisual.

«La figura de Goya no se agota. Su característica ruptura entre el mundo real e irreal llega hasta nuestras vanguardias. Su influencia en lo más dinámico de la cultura contemporánea, el mundo audiovisual, es innegable», ha afirmado.

Por su parte, Fernando Sanz ha apuntado la labor que ha hecho el cine desde sus inicios por ser capaz de proyectar a todos los espectadores «los motivos y mensajes» que Goya plasmó en su obra y que han tenido una finalidad iconográfica para reflejar la propia figura del pintor.

«Los ejemplos más interesantes son aquellos que han sido capaces de extraer la idea abstracta de cualquiera de sus obras para luego utilizar ese simbolismo como recurso cinematográfico», ha explicado el comisario.

Así, ha insistido en cómo producciones fílmicas y televisivas, realizadas a lo largo de más de un siglo, de múltiples nacionalidades, con gran diversidad de formatos y multitud de objetivos diferentes, han permitido desvelar «los poderosos simbolismos encerrados en la obra goyesca, tan compleja, poliédrica y hasta contradictoria».

Grabados como testimonio y documento social

En la primera parte de la exposición se muestra, a través del cine y la TV, la trascendencia de los grabados de Goya como testimonio y documento social de la época que vivió, partiendo del Goya más vitalista, alegre y popular de la Tauromaquia, que se plasmó en documentales de arte como la producción italiana ‘Francisco de Goya’ (Luciano Emmer, 1951) con música de Andrés Segovia.

A continuación se aborda el carácter contestatario de Goya, crítico con la hipocresía, la ignorancia, la superstición, los vicios y corrupciones del pueblo, y la tiranía del poder, presente en los Caprichos y en producciones como ‘Goya, genio y rebeldía’ (Konrad Wolf, 1971), o ‘Goya perro infinito’ (Antonio Pérez Olea, 1976).

Presentación de la exposición 'Goya. Grabado en la retina. La influencia de los grabados de Goya en el cine y en el audiovisual', en Zaragoza
Presentación de la exposición ‘Goya. Grabado en la retina. La influencia de los grabados de Goya en el cine y en el audiovisual’, en Zaragoza. EFE/Javier Cebollada

La sección concluye con el Goya reportero del terror de la guerra que adoptó una clara postura antibelicista en los Desastres, y que se utilizó en audiovisuales como ‘Agustina de Aragón’ (Juan de Orduña, 1950), ‘Morir en España’ (Mariano Ozores, 1965) o ‘Pascual Duarte’ (Ricardo Franco, 1975).

En la segunda parte de la exposición se enseña al Goya imaginativo y poderosamente creativo, sus mundos de fantasía y ensueño, de aplicación universal y atemporal, que han sido fuente de inspiración para multitud de artistas y cineastas como Bigas Luna, Carlos Saura en su obra ‘Goya en Burdeos’ (1999), Luis Buñuel en ‘El ángel exterminador’ (1962), entre otros ejemplos en el ámbito del cine amateur y de la videocreación, como sucede con las obras de José Luis Pomarón y Emilio Casanova.

Para Sanz, la película ‘Goya en Burdeos’ del también aragonés Carlos Saura es la que enfatiza más con lo que el pintor zaragozano reflejó. «Es el que mejor supo extraer a Goya todo el poderío y la fuerza narrativa y estética de su obra».

La muestra se enmarca dentro de los actos previos a la celebración del Bicentenario del fallecimiento de Goya en 2028.