Santa Cruz de Tenerife (EFE).- El presidente de Ashotel, Jorg Marichal, ha pedido este jueves a las istraciones públicas una solución urgente para las colas en la espera de los taxis, y el embotellamiento en momentos puntuales en las zonas de control de pasaportes a ciudadanos procedentes de fuera del espacio Schengen, problemas que, a su juicio, merman la competitividad del destino.
En una rueda de prensa para hacer balance de la coyuntura turística, Marichal también se ha quejado de la falta de inversiones en uno de los aeródromos con mayor flujo de pasajeros en España y donde, según ha opinado, además de los problemas mencionados, infraestructuras como las comerciales o de alimentación no son propias de un aeropuerto internacional.
Ha lamentado así que el aeropuerto viva a base «de parches» pese al «déficit» de inversión: «Nos taparon la boca con ocho millones de euros para la remodelación de la terminal, que no hay sino que verla, y solo unieron las pistas», ha criticado Marichal,
«Queremos que tanto la clase política canaria como la española se tome en serio el aeropuerto, que tiene problemas de espacio», ha resumido, a la par que ha agregado que no es de recibo que sus clientes tengan que hacer horas de cola desde que se bajan del avión hasta que llegan a los establecimientos hoteleros, «donde ahora encima en vez de 13 datos les tenemos que preguntar 42».
Se ha referido así a la implantación a iniciativa del Ministerio del Interior de una plataforma para el registro de viajeros que, según ha apostillado la vicepresidenta de Ashotel, Victoria López, «ni siquiera permite la inclusión de caracteres en otros alfabetos con los que trabajamos, como los de países nórdicos o el chino».
Respecto a los taxis, han vuelto a insistir en la necesidad de que en los momentos de picos, cuando la flota de Granadilla de Abona no puede dar servicio a quienes se aglomeran en la parada, puedan operar taxis que llegan al aeropuerto desde otros municipios a dejar pasajeros «y que se vuelven vacíos».
«No pedimos quitar el trabajo a nadie, pero cuando esa cola se vea que adquiere un tamaño que no es lógico, se debe dejar cargar a los taxis que están allí porque no estamos colaborando con la imagen turística de sostenibilidad y movilidad», ha agregado.
Marichal ha señalado que, tal y como son las normas, los hoteles no pueden «ni quieren» meterse en el negocio del transporte discrecional de viajeros, pero que si la situación continúa así intentarán «que las normativas sean más laxas para que los hoteles no pierdan clientes por este motivo».
Sobre el control de pasaportes, ha abogado por tomar medidas basadas en la tecnología, pues no es solo un problema de efectivos policiales, sino de infraestructura y de no haber tenido en cuentas los efectos que iba a producir el Brexit y contar solo con «seis máquinas», muchas de ellas «arrimadas a la pared».
Ocupación del 86 % para la temporada invernal
Los responsables de Ashotel se han mostrado satisfechos por cómo ha marchado el año a nivel turístico en el sector «que sigue tirando de la carreta de la economía canaria», con una ocupación para la temporada invernal del 86 %.
En cualquier caso, Victoria López ha advertido de que el aumento de los últimos años está relacionado por la proliferación de conflictos internacionales que «en cuanto terminen, y esperemos que sea pronto», cabe el riesgo de perder clientes si no se fidelizan.
En líneas generales, Marichal ha apuntado que se prevé un 25 % más de actividad que en 2019, por lo que no solo se ha recuperado el sector respecto a niveles previos a la pandemia sino que ha mejorado, con buenas cifras respecto a la desestacionalización, pues cada vez «se reparte mejor el turismo a lo largo de todo el año». EFE