Las Palmas de Gran Canaria (EFE).- La Prueba de a la Universidad (PAU) ha arrancado este miércoles en Canarias, un día después que en la mayoría del país, debido al reto logístico que supone llevar los exámenes y tribunales al resto de islas del archipiélago.
En el caso de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), se presentan a esta PAU cerca de 5.400 estudiantes, de los cuales 708 lo harán en la isla de Lanzarote y otros 504 en la de Fuerteventura, según los datos facilitados por la propia institución.
El vicerrector de Estudiantes de la ULPGC, David Sánchez, ha apuntado, en declaraciones a los periodistas, que esta es la tendencia de estudiantes de otros años, y que Canarias seguirá celebrando exámenes hasta el sábado.

En esta primera jornada, les ha tocado a los de Humanidades, Ciencias Sociales, Artes y el Bachillerato general para las asignaturas troncales: Lengua Española y Literatura, idioma extranjero y otra asignatura a elegir entre Historia de la Filosofía o Historia de España.
Llevar los exámenes a distintas sedes
El jueves lo hará el estudiantado de Ciencias e Ingenierías, siguiendo la misma estructura que sus compañeros de este miércoles.
«Debido a la insularidad, tenemos sedes tanto en Gran Canaria como en Fuerteventura y Lanzarote, mientras que la Universidad de La Laguna tiene sedes también en Tenerife, La Palma, La Gomera y El Hierro, por lo que implica transporte y más logística, y debemos tener el margen para podernos desplazar, desplazar al tribunal, los exámenes, etcétera», ha explicado Sánchez en relación al motivo por el cual en Canarias se ha empezado un día después esta PAU.
Esa complicada logística también la ha destacado el rector de la ULPGC, Lluis Serra, quien ha señalado a los periodistas que es un trabajo «complejo» por todo lo que conlleva de comunicación al alumnado que se presenta a las pruebas en cuanto a coordinación.
El rector afirma que no ha habido problemas logísticos
Serra ha resaltado que no ha habido ningún problema durante esta jornada inicial y que todo se está llevando a cabo «correctamente», y ha deseado que para el próximo año se puedan coordinar para celebrar las pruebas al mismo tiempo en todas las comunidades autónomas.
Sobre el cambio de modalidad del examen, tanto Sánchez como Serra han quitado hierro al asunto, rechazando que las pruebas sean más complicadas que en años anteriores.
«Es cierto que cambió la modalidad este año de forma transitoria, ya el año que viene serán mayores las diferencias, pero que las familias y los futuros estudiantes de la ULPGC estén tranquilos, que seguro que sacarán buenas notas», ha asegurado el rector.
Las novedades este año tienen que ver con una menor optatividad en los exámenes, ya que el alumnado no podrá escoger entre uno u otro, a lo que se suma una pregunta de tipo competencial que, según Sánchez, busca que los aspirantes «bajo una serie de datos, elaboren un texto desarrollando un pensamiento crítico, valorando la cohesión, teniendo en cuenta también las faltas ortográficas».
También las faltas ortográficas ganan protagonismo en esta PAU, ya que cada una restará 0,5 puntos hasta un total de tres, si bien las universidades canarias ya habían incluido este aspecto el año pasado, con una posible disminución de hasta cinco puntos. EFE