Toledo (EFE).- Javier Ortega es el nuevo secretario general de CCOO en Castilla-La Mancha tras haber obtenido el 93,4% de los votos en el XI Congreso del sindicato regional, y con una ejecutiva en la que incorpora nombres como Ángel León, María José Mesas o José Manuel Muñoz.
La de Ortega ha sido la única candidatura presentada en el congreso, celebrado en el hotel Beatriz de Toledo, para relevar a Paco de la Rosa, que ha estado ocho años al frente del sindicato y en cuya ejecutiva el nuevo secretario general ha sido secretario de organización.
Cinco nombres nuevos
De este cúpula directiva mantiene a la secretaria de acción sindical, Nunzia Castelli; a la de salud laboral y diálogo social, Raquel Payo; o al de formación sindical y juventud, Juan Carlos del Puerto.
Entre los nuevos nombres, Ortega ha incorporado a los exsecretarios generales de CCOO en Ciudad Real y en Cuenca, José Manuel Muñoz y María José Mesas, respectivamente; y también al responsable de la Federación de Industria en los últimos doce años, Ángel León.
Asimismo, suma otros como Ana Villaseñor, adjunta a la secretaría confederal de juventud, o David Montero, adjunto a la secretaría regional de finanzas.
A ellos ha aludido Ortega en su intervención tras su elección, en la que ha resaltado que esta nueva ejecutiva tiene dos personas menores de 30 años, y ha abogado porque CCOO apueste por la juventud pero «sin paternalismos».
Retos de la nueva etapa en CCOO
Entre las líneas prioritarias de trabajo, Ortega ha reclamado un gran pacto por los servicios públicos y otro por la racionalización del tiempo de trabajo en Castilla-La Mancha, así como un debate sobre el despido que dé respuesta a las recomendaciones europeas.
El nuevo secretario general de CCOO ha subrayado la necesidad de potenciar los servicios públicos como la educación, la sanidad o los servicios sociales en la región. Para ello cree que hace falta «un gran pacto regional entre istraciones, partidos políticos y representantes de los trabajadores por es capital para el bienestar de la sociedad».
Dentro del debate sobre la reducción de la jornada laboral, Ortega ha apostado por iniciar otro sobre la racionalización de los tiempos de trabajo en Castilla La Mancha, a fin de promover un «gran acuerdo».
Ha denunciado que «no es posible que en pleno siglo XXI muchísimas empresas sigan con jornadas partidas, sin sentido y con horarios maratonianos que hagan muy difícil la conciliación», lo que afecta especialmente, según ha afirmado, a las mujeres, sobre las que recae en mayor medida la carga del cuidado.

El despido, la última opción
También ha avanzado que es necesario incluir a Castilla-La Mancha en los debates sobre el despido, a fin de dar cumplimiento a las recomendaciones europeas que apuntan a que el despido es «barato» en nuestro país. Por ello ve necesario regularlo de manera que sea «la última opción» a la hora de extinguir un contrato.
Ortega ha mostrado su intención de dar «un paso más» en la lucha contra la siniestralidad laboral, una «lacra» en la que Castilla-La Mancha no puede continuar sufriendo las cifras actuales. Ha exigido que se corrija con «firmeza y a veces con dureza a las empresas incumplidoras».
Recuerdo a Gil y a Mata
El nuevo secretario general ha tenido también palabras de recuerdo para Juan Antonio Mata y José Luis Gil, recientemente fallecidos y cuyo «legado» en el sindicalismo de la región ha destacado, al igual que ha hecho con el de su predecesor, Paco de la Rosa.
Ortega ha mostrado su intención de dar a conocer las responsabilidades de su nueva ejecutiva el lunes 19, para comenzar a desempeñar su labor. También ha reconocido que la primera llamada que hará será a la secretaria general de UGT, Lola Alcónez, que estuvo este jueves presente en la inauguración del congreso. Con ella quiere abordar «muchas cosas conjuntas en el ámbito del diálogo social, en el ámbito de la negociación colectiva y en el ámbito de las funciones de los sindicatos». EFE