Burgos (EFE).- La alcaldesa de Burgos, Cristina Ayala (PP), ha anunciado que rectifica su decisión de eliminar las ayudas a tres ongs que atienden a personas migrantes en la capital burgalesa y que le había exigido Vox, su socio de gobierno que ahora, ante esta cambio de posición de la regidora, le ha advertido de que estará vigilante para que ni un solo euro recaiga en la inmigración ilegal.
En una comparecencia de urgencia y tras la multitudinaria manifestación de anoche en contra de la medida anunciada por el Ayuntamiento, Ayala ha explicado que su decisión responde a una cuestión de responsabilidad y ha confiado en que esta marcha atrás no haga «peligrar» el acuerdo entre el PP y Vox, por «sentido común».
En su opinión, «sería ridículo» que unas partidas como estas, que implican 119.000 euros anuales, pusieran en peligro un «proyecto de ciudad excepcional», por lo que ha apelado a la «responsabilidad» de Vox, que forma gobierno de coalición y que presentó el recorte de ayudas como condición para aprobar los presupuestos de 2025.
Esta decisión de la alcaldesa se traducirá en la presentación el martes, en la Comisión de Hacienda, de una enmienda al borrador de presupuestos para recuperar las ayudas a Accem, Burgos Acoge y Atalaya Intercultural, con las mismas cuantías que 2024.
Enmienda a la que Vox responderá con una transaccional y otra enmienda, ha anunciado el portavoz de estas formación en el Ayuntamiento y vicealcalde, Fernando Martínez-Acitores, que en una comparecencia posterior a la de la alcaldesa no ha aclarado si el pacto de gobierno está en riesgo.
Ni un euro a la inmigración ilegal
Martínez-Acítores ha indicado que van a exigir que las ayudas que se entreguen a esas tres ongs sean siempre referidas a la inmigración legal, regular, que «no se destine ni un euro a la inmigración ilegal», y exigirán también que existan comisiones de seguimiento y controles para que sea así.
La contrapropuesta de Vox incluirá incrementar el presupuesto en las partidas destinadas a familia, mayores e infancia, a cuestiones como el plan de ocio alternativo, programas de prevención del suicidio, contra el bullying, o de apoyo a mujeres embarazadas en situación de vulnerabilidad.
Martínez-Acítores ha reconocido que, igual que Ayala les ha llamado esta mañana para comunicarles su decisión, ellos le han expuesto esta contrapropuesta, pero la negociación y el debate se han quedado ahí, a la espera de lo que ocurra el próximo martes, confiando en que el PP las acepte.

Y no ha querido avanzar qué ocurrirá si el PP no acepta sus propuestas: «en ese momento veremos cómo actuamos», ha indicado, pero también ha reconocido que antes de tomar una decisión sobre romper el pacto de gobierno tendría que hablar con la dirección de Madrid, si bien «espera que no» sea así.
«Esta prisa no era mi idea», ha itido Martínez-Acítores, a quien le hubiera gustado poder hablar con el PP en lugar de protagonizar la confrontación pública y ha recordado que había un acuerdo cerrado de borrador de presupuestos «hasta hace tres horas» pero que el PP «por el motivo que sea va a enmendar».
Por responsabilidad y convicción
Cristina Ayala, acompañada en la sala de prensa del Ayuntamiento de Burgos por su equipo de concejales -igual que Martínez Acítores con los suyos- ha defendido su decisión de rectificar porque «está convencida de la tarea que realizan estas ongs, fantástica, para que la ciudad sea más tolerante, diversa y con mejor convivencia».
La alcaldesa ha mostrado su convencimiento de que se aprobará su enmienda porque el presupuesto, ha dicho, es bueno para la ciudad, pero ha insistido en que el PP ha tomado una decisión, por convicción, que está respaldada por el presidente del PP en Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, y la secretaria general del PP, Cuca Gamarra.
«El PP ha venido para sumar, para hacer un mejor Burgos, nunca para enfrentar», ha aseverado, y le corresponderá al resto de partidos decidir si aceptan la enmienda y aprueban el presupuesto, pues Ayala mantiene la intención de llevarlo para su aprobación inicial al pleno municipal del 22 de noviembre.
La regidora ha reconocido que les gustaría que Vox continuara en el equipo de Gobierno, que no tienen intención de romper la coalición, pero «hemos decidido que hay unas líneas rojas, que no queremos cruzar».
Y no descarta otros mecanismos para aprobar el presupuesto, si Vox no les apoya, como es la cuestión de confianza, pues no contempla un acuerdo con el PSOE, ya que «no están de en anda», es muy difícil hablar con la formación sociales, que se opone a todo, ha lamentado, y falta al respeto a la regidora constantemente .EFE