El presidente de la Cámara de Contratistas de Castilla y León, Enrique Pascual Gómez, durante la presentación este miércoles en Valladolid del balance de la licitación de obra oficial en la Comunidad Autónoma durante 2024 y las previsiones para 2025. EFE/Nacho Gallego

La obra pública se frena un 46% hasta abril en Castilla y León y anticipa un peor 2025

Valladolid (EFE).- La licitación de obra pública se ha reducido un 45,9 por ciento hasta abril en Castilla y León respecto al mismo periodo del año anterior, con 472 millones frente a los 873 del 2024, lo que según el presidente de la Cámara de Contratistas de la Comunidad, Enrique Pascual, no tiene más justificación que las disputas entre istraciones y que anticipa un peor 2025.

Oliva ha hecho este miércoles balance de la obra pública licitada en el 2024 en Castilla y León, que fue de 2.367 millones de euros, un 2,2 por ciento menos que en el 2023, una variación que ha calificado de «insignificante», con mejoras de las istraciones nacional y autonómica y caída de la local, que es de la que dependen las obras a las que acceden las empresas más pequeñas, y que están más repartidas.

El presidente de la Cámara de Contratistas de Castilla y León, Enrique Pascual Gómez, durante la presentación este miércoles en Valladolid del balance de la licitación de obra oficial en la Comunidad Autónoma durante 2024 y las previsiones para 2025. EFE/Nacho Gallego

Con los presupuestos prorrogados: más a ciegas

El responsable de la Cámara de Contratistas de Castilla y León ha sostenido que lo razonable es que la obra pública estuviera en la comunidad en torno a los 3.000 o 3.500 millones al año, lo que lejos de alcanzarse va progresivamente a la baja y estará en los 2.118 millones en 2025, con unos presupuestos prorrogados en los gobiernos central y autonómico, con los que se está «más a ciegas y que añaden incertidumbre en la carga de trabajo».

«Parece que no pasa nada con unos presupuestos prorrogados pero sí pasa», ha advertido Pascual, quien sobre el freno de ese 45 ó 46 por ciento hasta abril en la licitación de obra pública en Castilla y León ha observado que no hay explicación para ello ni las previsiones a la baja en las obras más allá que quienes tienen que licitar estén «más pendientes de pelearse entre ellos».

Ojo a las obras desiertas: son ya el 7%


Además, ha trasladado su preocupación porque las obras que quedan desiertas estén en el 7 por ciento, cuando lo normal es que estén en el 1 por ciento, y ha vaticinado que se llegara a que en una de cada diez obras no oferte nadie, esto es que se llegue al diez por ciento.

Ha achacado ese incremento en las obras desiertas a que la crisis de la construcción del 2007-2008 se llevó por delante la mitad de las empresas, empleo e industria auxiliar, que no se ha recuperado; con la crisis de las materias primas del 2021 que no se ha tenido en cuenta a la hora de sacar las nuevas obras, y con problemas para «atraer a gente joven, a operarios, al sector».

En concreto el sector tiene 65.000 trabajadores en la comunidad, que no llegan ni siquiera para mantener la obra pública que se ha realizado en la comunidad, con sólo 32.000 millones en la red viaria de Castilla y León, que en dos años se puede deteriorar.

La istración central: un aplauso por su seriedad en cumplimiento

En cuanto a los datos del 2024, recogen que se licitó obra por esos 2.367 millones, de los que 1.198, el 50,6 por ciento fueron de la istración central, el 0,3% más que en el 2023; 726 de la Junta, el 30,7 por ciento y un 2,8 por ciento de mejora, y 442 de las locales, con el 18,7 por ciento y un -14,5 por ciento.

En cuanto al grado de cumplimiento de lo adjudicado, ha valorado que la istración central haya llegado al 104 por ciento, debido a que ha incluido en lo licitado un mayor importe en previsión a las bajas con las que luego se adjudican las obras. Para Pascual, la istración central se ha comportado con «seriedad» y merece un aplauso.

El cumplimiento de la Junta fue del 64 por ciento, lo mismo que las locales, lo que deja una media del 80 por ciento, que ha considerado que es un dato «alto», ligeramente por debajo del 85 por ciento del 2023, aunque debería ser el cien por cien. EFE