BARCELONA, 28/01/2025.- Agentes de la Guardia Urbana de Barcelona impiden el avance de las decenas de personas que protestan ante el dispositivo que la Guardia Urbana, con la colaboración de los Mossos d'Esquadra, ha puesto en marcha a primera hora de esta mañana para recuperar el edificio conocido como la Antiga Escola Massana, ocupado desde el año 2020. EFE/Quique García

La Guardia Urbana de Barcelona desaloja la Antiga Massana frente a una concentración de protesta

Barcelona, (EFE).- El Ayuntamiento de Barcelona ha recuperado el edificio conocido como la Antiga Escola Massana, okupado desde 2020, tras la actuación de la Guardia Urbana frente a una concentración de protesta.

El desalojo de este edificio del Raval ha sido autorizado por el Juzgado Contencioso-istrativo número 17 de la capital catalana, según han informado fuentes municipales.


La policía ha armado un cordón para blindar el al edificio y se han vivido momentos de tensión, con cargas de los agentes contra los manifestantes.

Según fuentes de los Mossos d’Esquadra, se han practicado cinco detenciones (4 hombres y una mujer) por atentado a la autoridad, desobediencia y desórdenes públicos, por agresiones a agentes e intentar traspasar el cordón policial.


La policía autonómica ha indicado que 19 agentes antidisturbios de las Áreas Regionales de Recursos Operativos (ARRO) han resultado heridos leves, mientras que las organizaciones convocantes de la protestas cifran en una treintena los manifestantes heridos.


Los concentrados han lanzado consignas como «Ni os queremos, ni os necesitamos», «Pase lo que pase, unidad de clase» y «Rabia, rabia, rabia», al tiempo que han desplegado pancartas con el logotipo de la Antiga Escola Massana.

Un espacio de uso comunitario


En este recinto no vive nadie y hasta hoy era utilizado como espacio de actividades de diversas entidades, como el Sindicato de Vivienda del Raval, la Red de Apoyo Mutuo Laboral del Raval, la Red Popular de Alimentos, la Escoleta Popular del Raval y el Gimnàs Popular Matilde Landa.


Esta entidades han tildado el desalojo como ‘ilegal’ y han organizado una concentración en el lugar para protestar, si bien no han podido impedir el de la policía, que ha llegado a primera hora de la mañana, cuando no había nadie.


«Estamos viviendo un desahucio totalmente ilegal de una pieza clave de la organización de la clase obrera de la ciudad», ha explicado en una atención a los medios Ariadna Garcia, portavoz de la Antiga Escola Massana, en la plaza del Canonge Colom del Raval, una de las entradas a la plaza donde se encuentra el edificio.


El teniente de alcaldía de Prevención y Seguridad y concejal de Ciutat Vella, Albert Batlle, ha destacado que la recuperación del equipamiento se ha llevado a cabo sobre las 7 de la mañana y que en esos momentos en el edificio no había nadie, pues es un espacio que se usa para actividades de las entidades del barrio, pero en el que no vive ningún residente.

El Ayuntamiento no permitirá más okupaciones


«La recuperación ya está hecha y, por lo tanto, se mantendrá. No permitiremos más okupaciones», ha asegurado el teniente de alcalde ante las preguntas sobre si contempla la posibilidad de que los activistas vuelvan a entrar en el edificio.
Batlle ha manifestado la voluntad de «acabar con cualquier dinámica ilegal y de usurpación de los espacios públicos como las que han motivado las últimas actuaciones de recuperación» en el barrio.


El Sindicat de l’Habitatge Socialista de Catalunya (SHSC) ha denunciado en un comunicado que el Ayuntamiento ha «jugado sucio» porque, a su juicio, ha abierto un procedimiento judicial de forma «exprés ignorando a la Antiga Massana y a sus colectivos, evitando responder a ninguno de los recursos y procesos abiertos».


En este sentido, la organización ha convocado otra manifestación esta tarde en la rambla del Raval.


El pasado mes de julio el distrito de Ciutat Vella incoó un expediente istrativo de recuperación de la posesión de la finca, situada en el número 1 de la calle Floristes de la Rambla y que pertenece al ayuntamiento.


En octubre del pasado año ya se produjo un intento de desalojo de la Antiga Escola Massana, convertida en centro social después de ser ocupado por distintos colectivos sociales del barrio del Raval de Barcelona en la noche de Sant Joan de 2020, si bien un centenar de personas impidieron entonces el desahucio.


En los momentos más duros de la pandemia, los ocupantes repartieron alimentos a los vecinos más vulnerables del barrio. EFE