Madrid (EFE).- El president de la Generalitat, Carlos Mazón, ha pedido este jueves solidaridad en materia hidrológica al Gobierno de Castilla-La Mancha, y ha reprochado al presidente Pedro Sánchez que no se comunicara con él por su visita a la desalinizadora de Torrevieja (Alicante), ni hablara del trasvase Tajo-Segura.
Sánchez visitó este miércoles la planta desalinizadora de Torrevieja, una de las mayores de Europa, y Mazón no fue invitado al acto.
«Tengo que salir llorado de casa, es un asunto menor. Pero me llama la atención que al representante del Estado en la Comunitat Valenciana, que es el president de la Generalitat, no se le avise para una visita del presidente del Gobierno en Alicante, nada menos que para hablar de agua y nada menos que para no decir ni una sola palabra del Trasvase», ha señalado Mazón a su salida de un desayuno de prensa ofrecido por el presidente de la CEV, Salvador Navarro.
Además, ha dicho que «hace mucho tiempo que la actitud del ejecutivo de Castilla La Mancha no es solidaria en materia de agua, porque hace mucho tiempo que están en una especie de cueva ideológica, que no tiene que ver con el rigor».
El agua en España «es de todos»
«El agua en España es de todos», ha añadido, antes de explicar que «en Francia lo tienen resuelto hace muchos años, tienen todas las cuencas conectadas entre sí. Se llaman autopistas del agua. La suma adecuada entre trasvase, depuración, desalación, reutilización, ese es el equilibrio adecuado».
«Es incomprensible que el Tajo esté llevando a Portugal el doble de agua que pide Portugal y a los hermanos españoles de Alicante, Murcia y de Almería se nos esté negando lo que dicen los técnicos que nos corresponden -ha afirmado-. Es un argumento muy básico, muy básico».
«Apelo a Castilla-La Mancha y, sobre todo, al Gobierno de España, que es el que tiene la máxima responsabilidad. A Castilla-La Mancha les pido que reflexionen, no necesito ni insultarles ni acusarles de nada sin pruebas», ha añadido.
Recortes en el trasvase Tajo-Segura
En todo caso, «el lunes voy a ver a la ministra (Teresa Ribera) con voluntad de arreglar cosas, si es que aún se puede, después de todas las cosas que han dicho desde el Gobierno y que han hecho, como por ejemplo recortarnos injustificadamente 30 veces el trasvase Tajo-Segura», ha añadido.
A preguntas sobre la campaña gallega, ha expresado: «En la Comunidad Valenciana hemos salido de un procés pancatalanista», y no cree que en Galicia quieran «la peor mezcla posible entre nacionalismo y sanchismo».
«Yo estoy seguro de que Galicia no va a querer políticos que deciden la educación de los hijos o subidas indiscriminadas de impuestos como el impuesto de la muerte, el Impuesto de Sucesiones, que afortunadamente con el PP no va a ver jamás la luz», ha respondido también.
La ministra Diana Morant pide «solidaridad»
Por su parte, la ministra de Ciencia, Innovación y Universidades, Diana Morant, que también ha asistido al desayuno informativo, ha advertido de que el Gobierno «no va a entrar en la guerra del agua» porque la única manera de luchar contra la sequía es con «solidaridad» y «a través de la ciencia y la planificación».
La ministra ha recordado que el Gobierno aprobó un Plan Nacional Hidrológico y que, por tanto, «lo importante es la planificación». «El agua es un tema muy sensible» y, aunque se afronta una sequía, tiene su origen en el cambio climático y a eso hay que hacerle frente «con solidaridad, pero también a través de la ciencia y de la planificación», ha considerado.
Por eso, ha insistido en que el Gobierno no va a «entrar en la guerra del agua», porque el cruce de acusaciones solo genera inseguridad a la ciudadanía y porque la seguridad se ofrece con planificación y con inversiones realistas que permitan garantizar el agua siempre.
Sobre las críticas del president de la Generalitat, Carlos Mazón, sobre usar como «parches» las desalinizadoras ante la sequía, Morant ha respondido que estas instalaciones garantizan el abastecimiento de agua «para siempre».
Sistema de financiación autonómico
También se ha referido a las críticas sobre la financiación autonómica realizadas por el presidente de la Confederación Empresarial de la Comunidad Valenciana (CEV), Salvador Navarro, y ha puntualizado que cuando el sistema de financiación caducó, el Partido Popular tenía mayoría absoluta en la Comunitat Valenciana y en España y no hizo nada.
Por el contrario, ha subrayado Morant, durante el Gobierno de Pedro Sánchez las transferencias han subido un 40 % y esta región se han convertido en una de las comunidades con mejor financiación en infraestructuras, con un aumento de un 70 % en los presupuestos generales del Estado.
Por tanto, «a día de hoy y de manera realista, el Gobierno de España es el que mejor está financiando a la Comunidad Valenciana», ha subrayado la ministra, y ha añadido: «Si entramos en profundidad y de manera honesta» a analizar la financiación «tenemos que trabajar en la armonización fiscal», porque no se puede «poner la mano» para que le Gobierno recaude y reparta y al mismo tiempo reducir los impuestos a los que más tienen en esa comunidad.
Salvador Navarro (CEV) pide un trato «igualatorio»
El presidente de la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV), Salvador Navarro, ha pedido presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, «estabilidad» y un trato igualitario para la Comunitat Valenciana.
“Al presidente hay que decirle que existimos otros territorios”, ha expresado Navarro, quien ha además ha calificado de “broma” que se amenace con multas a las empresas que se han ido de Cataluña.
“Que se plantee multar a las empresas que se han ido a una zona con estabilidad política, cuando son ustedes los que han generado esa inestabilidad, es una broma. Las empresas somos soberanas para tomar la decisión de invertir en base a algo fundamental, la estabilidad social y política. Y hoy, en Cataluña, no la hay”, ha declarado Navarro.
El presidente de la patronal CEV ha ofrecido un desayuno de prensa en el Fórum Europa, para el cual le ha presentado el president de la Generalitat, Carlos Mazón.
Navarro ha prometido exigir la igualdad a través de una presencia continuada del lobby valenciano en Madrid. Es decir, más inversiones territorializadas, en especial en Alicante, apoyo a la industria, en especial en Castellón, solidaridad con el agua, apoyo al Corredor Mediterráneo y su conexión cántabra y financiación justa.
Esto último incluye la condonación de la deuda y un fondo de transición compensatorio de la injusticia padecida en este ámbito por la Comunitat.
