Unos 500 trabajadores del sector azulejero se han manifestado este viernes por las calles del centro de Castelló. EFE/Andreu Esteban

El sector azulejero se echa a la calle para clamar contra su pérdida de poder adquisitivo

Castelló.- Unos 500 trabajadores del sector azulejero se han manifestado este viernes por las calles del centro de Castelló para reivindicar el desbloqueo de la negociación del convenio colectivo con la patronal azulejera Ascer y que se llegue a acuerdos que acaben con la pérdida de su poder adquisitivo.

La marcha, convocada por los sindicatos UGT y CCOO, ha partido de la plaza de las Aulas para recorrer las principales calles del centro de la ciudad hasta la sede de Ascer.

Los manifestantes han portado pancartas con lemas como «derechos y salarios dignos en la industria azulejera»; «responsabilidad social de Ascer, derechos y salarios dignos» y otra en la que se podía leer ‘Ascer’ en una imagen del señor Burns de la serie televisiva Los Simpsons con billetes alrededor.

El secretario general de CCOO de Hábitat PV Comarques del Nord, Jordi Riera, ha explicado que la marcha quieren escenificar las reivindicaciones salariales, sociales y de avance en la negociación: «Hemos perdido en los últimos 3 años 8,5 puntos de poder adquisitivo» y «no podemos perpetuar pérdidas salariales a futuro», ante un panorama que, sostienen, se prevé de crecimiento para el sector de cara a 2025.

Por su parte, el secretario general de UGT-FICA Comarques de Castelló, Antonio Durán, ha señalado que no se entiende que un sector que es «el corazón de la provincia de Castellón» les esté «llevando a esta situación».

Unos 500 trabajadores del sector azulejero se han manifestado este viernes por las calles del centro de Castelló. EFE/Andreu Esteban

La primera de varias protestas del sector azulejero

A su juicio, el sector «está en manos de algunas empresas con alguna fisura en sus cuentas y quieren subsistir a costa de los trabajadores», porque el planteamiento del 6 % que les ha ofrecido la patronal en tres años «ellos dicen que es aceptable pero es insuficiente» porque los sindicatos reclaman un 10 % de subida salarial tras «años de pérdida en el poder adquisitivo, que ya no es atractivo para trabajar».

La marcha de este viernes es la primera de las acciones de movilización que han convocado los sindicatos y que seguirán con una convocatoria de huelga para los días 28 de febrero y 1 de marzo, así como una acción de protesta el 27 de febrero en la feria Cevisama en València, a la que quieren llevar una representación de los trabajadores de Roca Tiles, cuyo propietario, el grupo Lamosa, ha anunciado un ERE para 128 de sus 180 trabajadores.

Estas acciones se han convocado, según han señalado desde los sindicatos, por la paralización y el bloqueo en la negociación de un convenio colectivo que está estancado desde octubre de 2023.

Jordi Riera ha explicado que la intención de los sindicatos es de «negociar hasta la saciedad» y ha advertido: «No podemos continuar yendo a pérdidas siempre los mismos».

Unos 500 trabajadores del sector azulejero se han manifestado este viernes por las calles del centro de Castelló. EFE/Andreu Esteban

«La gente cobra menos que en 2008»

El sector azulejero, según Riera, tiene ciclos económicos con valles, subidas y bajadas pero «sigue generando beneficios», y por ello, tras el estancamiento de la negociación y ante la situación que atraviesan los trabajadores, tienen «la seguridad» de que el sector necesita modernizarse», no solo con el aumento del 10 % del salario, sino con medidas que «lo hagan más conciliador y más atractivo a los jóvenes».

Durán ha indicado que actualmente «la gente cobra menos que en 2008» y dentro de poco «habrá que revisar las tablas porque los sueldos quedarán por debajo del salario mínimo». A esto se suma, ha dicho, que su jornada laboral es de 176 horas, «la más alta del sector industrial de toda España».

Si en 2008 había en el sector 29.000 trabajadores, actualmente esa cifra se sitúa entre 13.500 y 15.000, de los cuales podrían estar afectados por un ERTE unos 5.600, ha apuntado Riera.

Ante este escenario el sector ha salido este viernes a la calle y augura nuevas medidas de protesta a partir de marzo si no se alcanza un acuerdo con la patronal en el convenio colectivo.