Logroño (EFE).- Los técnicos prevén iniciar a lo largo de este lunes los trabajos de desescombro controlado de los restos de la torre de la iglesia de la Asunción de Viguera (La Rioja), que data del siglo XVII y que se derrumbó anoche sin causar daños personales, para catalogar todos sus elementos y restaurarla en cuando sea posible.
El consejero de Cultura del Gobierno de La Rioja, José Luis Pérez Pastor; junto al alcalde de Viguera, Álvaro Manzanos; y el delegado de Patrimonio Cultural de la Diócesis de Calahorra y La Calzada-Logroño, Jesús Merino, han visitado esta localidad, situada a unos 23 kilómetros de Logroño y con unos 380 habitantes.
En declaraciones a los periodistas, Manzanos ha detallado que hay una veintena de vecinos desalojados de once viviendas desde anoche, pero prevé que puedan volver a sus domicilios este lunes, en cuanto los técnicos lo autoricen; y el derrumbe causó daños en cuatro coches.

El colegio utiliza como patio el espacio ubicado junto al pórtico de la iglesia, que comenzó a construirse en el siglo XVI y es un Bien de Interés Cultural (BIC), por lo que se ha decidido, «por seguridad», que las clases se desarrollen en otro lugar, ha añadido.
Pérdida de «un emblema»
El alcalde ha indicado que se desconocen las causas del desprendimiento de esta torre, rematada con un chapitel octogonal de ladrillo y que fue rehabilitada por la Diócesis riojana en 2017.
Por ello, ha constatado que la pérdida de este elemento patrimonial «es muy importante» para el municipio, ya que era «un emblema» de Viguera.

«Lo más importante es que no ha habido ninguna víctima. Anoche vino la unidad de rescate canina y los servicios de emergencia estuvieron trabajando hasta que no echamos en falta a nadie», ha explicado aliviado.
El alcalde ha recalcado que él pasaba a diario por debajo de la torre y no había notado «nada extraño».
El consejero de Cultura ha añadido que los restos de la torre se catalogarán en un solar cedido por el Ayuntamiento y, de forma paralela, los arquitectos de la Diócesis realizarán un diagnóstico de la situación, ha agregado.
Hasta que no se despeje la base de la torre, no se podrá comprobar el estado de los cimientos para establecer las posibles causas del desprendimiento.
El delegado de Patrimonio de la Diócesis ha indicado que el objetivo es reconstruir la torre en cuanto sea posible, para lo que se conservarán todos los elementos singulares, como el reloj, las campanas, la veleta y las molduras de los ladrillos, ya que están todos catalogados.
Aunque en el templo no han aparecido grietas y aparentemente está en buen estado, por seguridad», se ha suspendido el culto religioso en la iglesia «el tiempo que sea necesario».