La artista Soledad Sevilla posa en el Institut Valencià d’Art Modern (IVAM) durante la presentación de una retrospectiva suya en ese museo. EFE/Manuel Bruque

El IVAM acoge “la obra infinita” de la artista valenciana Soledad Sevilla

València (EFE). “Los artistas nos pasamos la vida pintando el mismo cuadro”, con esta frase ha definido el hilo conductor de su obra Soledad Sevilla, que hoy ha presentado en el Institut Valencià d’Art Modern (IVAM) la exposición «Ritmos, tramas, variables», una retrospectiva que recorre más de seis décadas de creación de la artista valenciana y que, según la comisaria de la muestra, Isabel Tejeda, revela “una obra infinita” en desarrollo constante.

La exposición, que ocupa seis salas del museo y reúne más de un centenar de obras, poniendo el foco en piezas de gran formato, incluye algunas de sus series más reconocidas, como Las Meninas o La Alhambra, junto a obras inéditas pertenecientes a colecciones valencianas.

Una persona toma imágenes de la exposición ‘Soledad Sevilla. Ritmos, tramas, variables’, durante la presentación de la retrospectiva en el IVAM. EFE/Manuel Bruque

Según la artista, esta exposición ofrece una “mirada distinta” respecto a la que ya pudo verse el año pasado en el Museo Reina Sofía, ya que está estructurada por núcleos temáticos que “le dan una potencia y un interés” diferentes.

Soledad Sevilla ha reconocido que “los artistas nos pasamos la vida pintando el mismo cuadro”, en alusión a la coherencia y persistencia de sus búsquedas plásticas.

«Siempre estas buscando algo que no has podido conseguir», ha confesado la artista.

Una persona recorre la exposición ‘Soledad Sevilla. Ritmos, tramas, variables’, durante la presentación de la retrospectiva en el IVAM. EFE/Manuel Bruque

La necesidad de “restaurar el lugar que merecen las mujeres en la historia del arte”

La directora del IVAM, Blanca de la Torre, ha señalado que se trata de su primer proyecto al frente del museo y ha considerado un “honor” abrir etapa con una muestra dedicada a Sevilla, una artista que, en palabras de la directora, «tuvo que enfrentarse a una profesión en la que apenas había mujeres».

Durante el acto, la secretaria autonómica de Cultura, Pilar Tébar, ha destacado a Sevilla como “una de las profesionales más prestigiosas del sector cultural”, mientras que el director del Museo Reina Sofía, Manuel Segade, ha subrayado la necesidad de “restaurar el lugar que merecen las mujeres en la historia del arte”.

“Para mí es un orgullo estar en una mesa donde soy la minoría”, ha señalado Segade, en alusión a que ha sido el único hombre sentado en la mesa junto a las cuatro mujeres que lo acompañaban: la artista, la directora del IVAM, la secretaria autonómica de Cultura y la comisaria de la muestra.

La artista Soledad Sevilla junto a la directora del Institut Valencià d’Art Modern (IVAM), Blanca de la Torre (i), durante la presentación de la exposición. EFE/Manuel Bruque

Una artista de «los grandes tamaños»

La comisaria de la muestra, Isabel Tejeda, ha recordado que en el estudio de Sevilla “cada día encontraba una maravilla” y ha puesto en valor la relación de la artista con su ciudad natal, Valencia, y su paso por Boston, donde surgió esa idea del «dibujo inacabado» y tomó o con el historiador de arte Oleg Grabar, clave en la gestación de sus series más conocidas.

“La obra de Soledad Sevilla tiene un fuerte componente contemplativo”, ha señalado Tejeda, quien ha subrayado también la importancia del formato: “los grandes tamaños están en su ADN”.

En el museo destacan estas piezas de gran escala que ocupan paredes completas, junto a una instalación con forma de estanque que refuerza el carácter inmersivo de la muestra.

La exposición, que permanecerá abierta en el IVAM tras su paso por Madrid, busca mostrar la continuidad de una obra en la que, como ha dicho la propia Sevilla, cada pieza responde a una misma búsqueda inagotable.