Santa Cruz de Tenerife (EFE).- El vicepresidente y consejero de Economía del Gobierno de Canarias, Manuel Domínguez, ha dicho este jueves que es partidario de que haya aumentos salariales en las islas, a la vez que ha advertido de que medidas como la subida del salario mínimo interprofesional (SMI) resta competitividad a las empresas canarias.
El SMI supone en Canarias el 72 % del salario medio, mientras que en otras regiones españolas es el 55%, lo cual lleva a «pérdida de competitividad» de las empresas de las islas, ha dicho el vicepresidente en una comisión parlamentaria en la que ha respondido a algunas preguntas sobre los salarios.
También ha dicho que es partidario de que en las negociaciones de los convenios colectivos que se van a llevar a cabo en 2025 haya mejoras laborales y aumentos salariales, pero siempre que los costes laborales para las empresas no se repercutan en los precios de los bienes y servicios producidos, porque entonces no habría aumento del poder adquisitivo de los trabajadores, ha explicado Domínguez.
El vicepresidente respondió primero a la diputada de CC Cristina Calero, preocupada por la repercusión que el aumento de los costes laborales está teniendo en los autónomos y las pequeñas y medianas empresas de Canarias.
«Hay que mejorar los salarios, nadie lo discute, pero no ahogando a pymes y autónomos», ha dicho Calero al vicepresidente.
Manuel Domínguez ha coincidido en esa misma preocupación sobre el aumento de los costes laborales, que constituye «un desafío» para las empresas canarias a la hora de competir.
«Nadie puede estar en contra de que haya incrementos salariales o que se mejoren las condiciones laborales», ha insistido el vicepresidente, pero ha precisado que la subida del SMI o la reducción de la jornada laboral son «factores exógenos» que se han producido «sin consenso».
Subir el salario mínimo incrementa los costes de las empresas y estas pueden repercutir el coste en el producto o servicio final con lo cual el poder adquisitivo puede que no mejore o que incluso empeore, ha dicho el consejero de Economía.
Ha recordado que la carta social europea recomienda que el SMI esté en el 60% del salario medio, pero en el caso de Canarias es el 72% del salario medio, mientras que para otras comunidades es el 55%, lo cual lleva a una pérdida de competitividad y a un empeoramiento de la situación que se debe compensar con mejoras en la productividad.
Después, en respuesta al diputado de Nueva Canarias Luis Campos, Manuel Domínguez ha dicho que el Gobierno es partidario de que se suban los salarios, siempre que esa subida repercuta en una mejora del poder adquisitivo, lo cual viene ligado a mejoras en la productividad.
Luis Campos ha defendido por su parte que haya aumentos salariales puesto que hay un gran crecimiento del beneficio de las empresas que debe repercutir en sus trabajadores, que pierden poder adquisitivo.
Por eso el representante de NC ha defendido que las subidas salariales estén vinculadas a los beneficios empresariales y a la inflación, para garantizar el poder adquisitivo de los salarios.
Y ha denunciado que en un momento en el que «tienen beneficios brutales» los empresarios pretendan vincular posibles subidas salariales a mejoras en la productividad, un discurso que comparte el Gobierno de Canarias. EFE