Madrid (EFE).- Las cinco grandes empresas europeas del sector de defensa cerraron 2024 con un beneficio de 6.313 millones, un 10,55 % más que en 2023 y con perspectivas optimistas para los próximos años después de que varios países europeos hayan decidido aumentar su gasto militar tras el giro de la política exterior estadounidense.
La británica BAE Systems, la italiana Leonardo, las sas Thales y Airbus y la alemana Rheinmetall, referentes en Europa, aumentaron sus ingresos un 13,6 % hasta los 94.120 millones, aunque durante la presentación de sus respectivos resultados anunciaron mejores expectativas, con un aumento en su cartera de pedidos para próximos ejercicios.
Thales cuenta con una cartera de pedidos ya superior a todos los ingresos de 2024, mientras que la mejora en la cartera de Leonardo ha obligado al grupo italiano a actualizar su plan industrial.

Según su nuevo plan, en el período 2025-2029 espera un volumen de pedidos acumulados de 118.000 millones de euros y unos ingresos acumulados de hasta 106.000 millones, mientras su consejero delegado, Roberto Cigolani, ve «un potencial de crecimiento orgánico del negocio más allá de todas las expectativas».
Por su parte, el consejero delegado de Rheinmetall, Armin Papperger, explicó hace una semana que el grupo ha invertido casi 8.000 millones de euros en los últimos años para construir nuevas plantas y asegurar su cadena de suministro, conscientes de que Europa ha comenzado «una era de rearme».
Este nuevo aumento concuerda con la creciente preocupación de los países comunitarios por incrementar su gasto en defensa, lo que ha provocado un incremento de confianza traducido en una revalorización de sus acciones.
Una veloz subida en bolsa
Las empresas del sector viven estos tres últimos meses un ‘rally’ alcista, confirmado en los títulos de Rheinmetall, que alcanzan una revalorización de más del 137 % desde inicio de 2025, hasta los 1.432,5 euros.
También se observa esta subida en la británica BAE Systems, el segundo mayor contratista militar del mundo y que aumenta su cotización un 44 %.
La sa Thales, por su parte, cuenta con una subida del 82 %, mientras que Leonardo registra un aumento en sus títulos del 81 % en 2025, mucho mayor que Airbus, más diversificado y que este año sube un 7,3 %.
Indra y Navantia, a la expectativa del aumento de gasto
Este aumento también ha llegado a España a través de Indra, centrada en defensa y en otros servicios de consultoría y que este año ha subido un 56 %, tras anuncios como el de España, comprometida a incrementar el gasto en defensa al 2 % del PIB en 2029.
El presidente ejecutivo de Indra, Ángel Escribano, ha reiterado que la compañía cumplirá «antes de plazo» su plan estratégico, que espera facturar 10.000 millones en 2030, mientras Navantia contaba el pasado julio con una cartera de pedidos de 8.214 millones de euros y unos ingresos de 1.434 millones en 2023.

El ‘Impacto económico de la Industria de Defensa, Seguridad, Aeronáutica y Espacio’, de PwC, recalca que el sector facturó 8.042 millones en 2023.
Antonio Fonfría, profesor de Economía Aplicada en la Universidad Complutense, destacó la pasada semana en una jornada del Consejo General de Economistas (CGE) que por cada euro de los presupuestos destinado a defensa, existe un retorno de entre 2,1 y 2,3 euros.
El profesor de Finanzas de EAE Business School Alexis Ortega explica a EFE que este aumento del gasto en defensa se debe a «un cambio sustancial en el escenario geopolítico» y ve que «la rebaja de los planes de austeridad promulgados desde 2009» por parte de Alemania tendrá consecuencias a todos los países europeos, como se observa en las fluctuaciones de la prima de riesgo.
Ortega incide en que ello tendrá implicaciones para los de la UE y también para los particulares, pero recalca que este aumento en defensa e infraestructuras tendrá un efecto de crecimiento económico si se alcanza el objetivo de que ese gasto alcance el 2 o incluso el 3 % del PIB en los países europeos.