Pekín (EFE).- China y la Unión Europea (UE) pactaron reanudar «pronto» las negociaciones para alcanzar un acuerdo de precios mínimos sobre los vehículos eléctricos del país asiático, informó este jueves el Ministerio chino de Comercio.
El portavoz de la cartera, He Yadong, indicó en una rueda de prensa que se trata de uno de los compromisos alcanzados en la reunión que mantuvieron el pasado 28 de marzo en Pekín el ministro chino de Comercio, Wang Wentao, y el vicepresidente ejecutivo de la Comisión Europea y comisario de Comercio, Maros Sefcovic.
La negociación se inscribe en el marco de la investigación antisubsidios iniciada el año pasado por Bruselas contra los vehículos eléctricos (VE) fabricados en China, a los que los Veintisiete impusieron aranceles.
El país asiático respondió a esa medida con gravámenes provisionales al brandy tras amenazar con una investigación sobre las importaciones de lácteos y otra sobre la carne de porcino procedente de la UE.
«Intercambio de opiniones franco, profundo y pragmático»
Wang y Sefcovic, aseguró el vocero, mantuvieron un «intercambio de opiniones franco, profundo y pragmático» y discutieron la investigación europea, centrada en posibles subvenciones estatales que permitirían a los fabricantes chinos exportar vehículos eléctricos a precios considerados desleales.
Las negociaciones para alcanzar un compromiso de precios mínimos buscan concretar un mecanismo que evite la imposición de aranceles compensatorios mediante acuerdos voluntarios que establezcan tarifass mínimas para las exportaciones.
Pekín sostiene que con este paso se pretende «crear un entorno favorable para la inversión empresarial» y «profundizar la cooperación industrial» entre compañías chinas y europeas.

El anuncio se produce en medio de un posible proceso de acercamiento entre el gigante asiático y la UE propiciado, a pesar de las fricciones por resolver, por el regreso a la Casa Blanca de Donald Trump, que ha emprendido una guerra comercial global sin precedentes.
Precisamente este jueves entró en vigor el gravámen del 25 % para los automóviles, camiones ligeros y autopartes importados por Estados Unidos, en la misma jornada en que Trump anunció la imposición de aranceles «recíprocos» a casi todos los países del mundo, incluyendo de un 20 % para la UE y un 54 % para China -porcentaje que incluye la tasa del 20 % anunciada semanas antes.