Vista del aeropuerto de Adolfo Suárez Madrid-Barajas. EFE/ Nahia Peciña

España se suma a una acción internacional contra el «ecopostureo» en la aviación

Madrid (EFE).- El Ministerio de Derechos Sociales, junto a autoridades de protección al consumidor de 35 países, ha firmado una carta dirigida al sector de la aviación para luchar contra el «greenwashing» (o «ecopostureo») en las aerolíneas, es decir contra aquellas prácticas engañosas de algunas empresas que ofrecen una imagen medioambiental respetuosa que no coincide con la realidad.

El Ministerio ha llevado a cabo esta acción internacional a través de la Dirección General de Consumo junto a 35 países representados en diferentes autoridades internacionales de protección a los consumidores, para evitar comunicaciones comerciales engañosas en materia medioambiental.

Se trata de una acción para evitar el «ecopostureo» y asegurar que las comunicaciones que hagan estas compañías sean “veraces, claras, precisas” y respaldadas por pruebas científicas sólidas.

En la carta se exige a las aerolíneas rigor en las afirmaciones medioambientales que utilizan en su comunicación comercial y reforzar así el cumplimiento de la legislación de protección de las personas consumidoras, según explica el Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 en un comunicado.

La misiva ha sido impulsada por la red internacional IEN (International Consumer Protection and Enforcement Network), una organización que engloba a más de 70 autoridades de protección a las personas consumidoras de todo el mundo y en la que participa el Gobierno de España a través de Consumo.

En esta acción, además de la istración española, participan autoridades de consumo de países europeos como Bélgica, Dinamarca y Noruega; países de América Latina como Colombia, Chile y Perú; y países de África Oriental y Austral representado en la unión aduanera COMESA, en la que se encuentran naciones como Kenia, Angola y Etiopía.

Recomendaciones a las compañías aéreas

A través de la carta enviada por estas autoridades internacionales de Consumo, se recuerda a las compañías aéreas que no se debe engañar a sus s sobre cuestiones medioambientales y se les traslada una serie de recomendaciones orientadas a asegurar que las comunicaciones que hagan en materia de medio ambiente cumplan con las normas de protección a las personas consumidoras.

Entre otras, las comunicaciones deben ser veraces, claras y precisas y deben estar respaldadas por pruebas científicamente sólidas y fiables.

Deben evitarse términos vagos como “ecológico” o “sostenible” que puedan inducir a error sobre el impacto medioambiental real; y no tienen que exagerarse beneficios medioambientales de cambios menores.

Debe explicarse claramente cuál es el impacto, las incertidumbres y las limitaciones de los sistemas de compensación de carbono; no han de destacarse en las comunicaciones aspiraciones futuras inciertas como ser «climáticamente neutros», sino solo medidas específicas adoptadas o que estén en curso e indicarlo así.

La comunicación sobre el combustible de aviación sostenible (SAF) debe ser clara, precisa y no engañosa. El sector de la aviación considera que este combustible es un método clave para reducir las emisiones netas de carbono, pero es necesario que se proporcione información adicional para contextualizar su alcance en la reducción de emisiones.

Esta acción, realizada en el marco de la IEN, forma parte del compromiso del Ministerio de Derechos Sociales para garantizar una información veraz y transparente a los consumidores, «una cuestión de especial relevancia cuando afecta a sectores estratégicos como el del transporte aéreo, donde las decisiones de consumo tienen un elevado impacto económico y medioambiental».