Melilla (EFE).- La delegada del Gobierno en Melilla, Sabrina Moh, ha asegurado este jueves que el Gobierno central está trabajando con Marruecos para reabrir la aduana comercial “a la mayor velocidad posible”.
“Siempre he dicho y he mantenido desde que se cerró la aduana comercial en 2018 que este Gobierno iba a trabajar para poder reabrir con todas las garantías”, ha subrayado Moh a los periodistas tras lamentar que se publiquen “informaciones no contrastadas en determinados medios de comunicación” sobre la reapertura de la aduana comercial.
“Entiendo que una de las premisas de los periodistas es contrastar las noticias antes de dar información porque no podemos olvidar que al final la información la consume la ciudadanía y ahora mismo lo que genera es esa incertidumbre continua”, ha aseverado.
La máxima representante del Gobierno central en la ciudad autónoma ha recalcado el trabajo conjunto para la puesta en marcha de “una serie de actuaciones coordinadas entre ambos países”, aunque ha avisado que la aduana comercial ya no será como antes, sino una adaptada al siglo XXI.
“Hemos ido siempre dando pasos con el objetivo de conseguir un trabajo bien hecho y unos resultados óptimos, y se hará de manera progresiva hasta alcanzar la plena normalización”, ha agregado.
Melilla advierte que sería «ciudad marroquí» con las condiciones para reabrir la aduana
El presidente de Melilla, Juan José Imbroda, ha advertido de que si se ejecuta la reapertura de la aduana comercial con Marruecos bajo las condiciones del país magrebí mencionadas por algunos medios, Melilla sería considerada como “una ciudad marroquí más en la que se podrían comprar los productos que Marruecos quisiera”.
‘El Faro’ de Melilla publicó este miércoles una información en la que asegura que en las condiciones marroquíes para la reapertura de la aduana comercial figura que el país magrebí «introduciría en Melilla sus áridos, frutas, verduras y pescados».
A cambio, permitirá que desde la ciudad autónoma «entren por la aduana determinados productos, que determinarán las autoridades marroquíes en su caso».
En declaraciones a los periodistas, Imbroda ha dicho que la decisión supondría que la “histórica” aduana comercial que tiene la Unión Europea en la ciudad autónoma quedaría “completamente anulada”.
“Para que hagan eso, mejor que se estén quietos y no hagan nada”, ha señalado ante “este disparate colosal” que, según él, “cedería soberanía económica y política” a Marruecos.
Asimismo, ha aseverado que “no va a beneficiar a Melilla porque los comerciantes no van a poder poner encima de la mesa lo que es el tráfico aduanero de viajeros”.
“No se van a poder vender zapatos, camisas, libros, etc., y, sin embargo, Marruecos va a poder vender productos que ellos pueden vender, por lo que el comercio local no va a beneficiarse en nada”, ha sostenido.

«Rechazo rotundo»
El dirigente popular ha mostrado su “rechazo rotundo” a dicho tránsito comercial y ha instado a la Delegación del Gobierno en Melilla a que se reúna con el Gobierno melillense para solventar esta situación, aunque ha lamentado que “no les interesa para nada la opinión de la mayoría de Melilla, que la representa el Gobierno de la Ciudad”.
Imbroda ha avisado que se opondrán a esta decisión con todas sus fuerzas, acudiendo a cualquier instancia “para defender la economía de la ciudad”.
“No se le podría haber ocurrido nunca una medida peor al Gobierno español contra Melilla”, ha zanjado.
Este jueves, la delegada del Gobierno en la ciudad autónoma, Sabrina Moh, ha asegurado que el Gobierno central está trabajando con Marruecos para reabrir la aduana comercial “a la mayor velocidad posible” y ha lamentado que se publiquen “informaciones no contrastadas en determinados medios de comunicación” sobre esa reapertura.