Santiago de Compostela (EFE).- El ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, Pablo Bustinduy, ha sido tajante al afirmar que el Gobierno «debe cumplir con la palabra dada» y que, por tanto, «cualquier contrato que pueda estar en marcha» con Israel en lo relativo a armas «debe ser rescindido y suspendido».
«Es absolutamente injustificable o inaceptable que se pueda producir ninguna operación de compraventa de armas con ningún Estado al que tanto la Corte Internacional de Justicia como la Corte Penal Internacional han acusado de estar cometiendo un genocidio continuado en Gaza», ha expresado este viernes el ministro de Sumar en un encuentro en Santiago de Compostela con la alcaldesa de la ciudad, Goretti Sanmartín.
«Se ha producido una rectificación»
A preguntas de los periodistas sobre la rescisión del contrato de compra de munición a Israel por parte del Gobierno, Bustinduy ha asegurado que opina que «se ha producido una rectificación que era necesaria en ese sentido», y ha afirmado que «cualquier otra operación que esté en marcha debe ser auditada, estudiada y suspendida».
«Creo que ese es el compromiso que alcanzamos y luego las responsabilidades de cada cual hay que asumirlas actuando», ha declarado en relación a la compra de armas por parte del Ministerio del Interior y la posterior rescisión del contrato de compra de munición a la empresa israelí IMI Systems por parte del Ejecutivo.
Carta a Defensa el pasado mes de octubre
Bustinduy ha recordado que en el pasado mes de octubre su ministerio remitió una carta a Defensa «esgrimiendo todos los argumentos jurídicos y legales por los cuales había que rescindir cualquier contrato que estuviera en proceso, en marcha o suscrito respecto a la compra o venta de armamento con Israel o con cualquier empresa participada por empresas israelíes».
En este sentido, ha afirmado que la respuesta que obtuvieron fue que «desde el día 7 de octubre de 2023 no se ha producido ninguna operación ni de compra ni de venta de armamento» con Israel, por lo que el Gobierno «debe cumplir con la palabra dada y respetar los acuerdos y los compromisos en materia de derechos humanos».
«Ningún contrato de compra o venta de armamento a empresas israelíes tiene justificación y cualquiera que exista debe ser suspendido», ha insistido.
