Vigo, 30 abr (EFE).- La Guardia Civil ha conseguido desarticular, con cuatro detenciones en el marco de la Operación Yaunde, a una banda asentada en Vigo que estaba especializada en secuestros y extorsiones.
Según explica el instituto armado, el grupo estaba liderado por un ciudadano portugués que fue detenido en Vigo en febrero.
La investigación comenzó el 15 de noviembre
La investigación comenzó el 15 de noviembre tras la denuncia interpuesta por un familiar directo de una de las víctimas. Esta comunicó a la Guardia Civil de Ciempozuelos (Madrid) que les estaban reclamando medio millón de euros para liberar a su allegado y otra persona.
El día siguiente, hacia las 19:00 horas, los rehenes fueron puestos en libertad en las inmediaciones de la estación de tren de Vigo, donde fueron localizados por agentes de la Guardia Civil.
Tras recibir asistencia sanitaria por las heridas que presentaban y gracias a los datos que aportaron, los investigadores comenzaron a encajar las piezas del caso hasta lograr la plena identificación de los autores de los hechos.
Así, conocieron que las víctimas se habían trasladado a Vigo para cerrar un negocio y que uno de los secuestrados había acudido como intérprete. A su llegada a la localidad gallega, fueron abordados violentamente y los secuestradores les introdujeron en los maleteros de dos vehículos para trasladarlos a un poblado marginal próximo a la ciudad.
Atacados y maniatados
Allí, fueron brutalmente atacados y permanecieron maniatados, con los ojos y la boca tapada por cinta americana, durante toda la noche.
Los captores retuvieron en distintos lugares a las víctimas durante los tres días que duró el secuestro e incluso cruzaron la frontera con Portugal.
En los tres días que duró el secuestro, extorsionaron a los familiares para lograr el botín.
Detenido el cabecilla en febrero
Tras identificar plenamente al cabecilla del grupo, y dadas las sospechas que tenían los investigadores de que pudieran estar fraguando un nuevo secuestro, el pasado 28 de febrero los agentes procedieron a detenerlo en Vigo y continuaron la investigación hasta dar con los otros integrantes del grupo criminal.
La investigación fue desarrollada por las Unidades Orgánicas de Policía Judicial de Madrid y Pontevedra, bajo la dirección del Juzgado de Instrucción 2 de Vigo y la Fiscalía de la ciudad gallega.