Bruselas, (EFE).- El Parlamento Europeo tramitará en las próximas semanas dos solicitudes del Tribunal Supremo español para retirar la inmunidad parlamentaria al líder de «Se Acabó la Fiesta», Luis ‘Alvise’ Pérez, un proceso relativamente común en la Eurocámara, que suele prolongarse varios meses y que no afectará en cualquier caso al escaño de Pérez.
La inmunidad parlamentaria permite que un eurodiputado sea libre para ejercer su mandato sin ser perseguido políticamente de forma arbitraria, pero no escuda a los eurodiputados contra cualquier proceso legal en su contra; sólo lo hace contra aquellas imputaciones por sus opiniones o votos expresadas en el marco de su actividad parlamentaria.
Dos suplicatorios del Tribunal Supremo
Los dos suplicatorios que el Tribunal Supremo ha pedido en el caso de Pérez se deben a la difusión de una prueba falsa de covid del exministro de Sanidad y presidente de la Generalitat catalana, Salvador Illa, en 2021 y, desde este mismo lunes, a los mensajes que dirigió en la red Telegram contra la fiscal de delitos de odio de Valencia, Susana Gisbert.
El primer paso será que la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola (o uno de sus catorce vicepresidentes) trasladen al pleno del Parlamento Europeo la petición del Tribunal Supremo y la remitan a la comisión de Asuntos Jurídicos, que se encarga del trámite.
Esto sólo puede suceder en un pleno, como el que se celebra este miércoles y jueves en Bruselas o los de las semanas del 16 de junio y del 7 de julio en Estrasburgo (Francia).
Comisión de Asuntos Jurídicos
Una vez resuelto este paso, los tiempos los marca la comisión de Asuntos Jurídicos, que tiene que recibir la documentación y nombrar un ponente para cada una de las peticiones que emita el Tribunal Supremo.
Por el momento son dos, pero podrían acumularse más porque el eurodiputado tiene más causas abiertas en la justicia española.
El ponente es el encargado de redactar el informe sobre el caso y la recomendación sobre si levantar o no la inmunidad. El único requisito es que no sea de nacionalidad española y que no comparta grupo político con Pérez, quien de hecho no está adscrito aún a ninguna de las formaciones de la Eurocámara.
El proceso entero se lleva a cabo a puerta cerrada en varias audiencias en la comisión de Asuntos Jurídicos, que puede solicitar más información y también da al afectado la opción de comparecer brevemente para exponer su caso y defenderse, acompañado si quiere por un abogado que le asesore.
Votación antes de pasar al pleno del Parlamento Europeo
Una vez el ponente tiene lista su recomendación, ésta se debate entre los diputados de esta comisión y se somete a votación antes de que en última instancia la vote también el pleno del Parlamento Europeo. Se trata en este caso de un voto a mano alzada que se supera con mayoría simple.
El eurodiputado siempre puede recurrir el levantamiento de su inmunidad ante la justicia europea. No hay tiempos establecidos para una decisión final, que principalmente depende de la frecuencia de reuniones de la comisión de Asuntos Jurídicos, pero es probable que se extienda durante varios meses.
Tramitadas 200 solicitudes de levantamiento de inmunidad
El Parlamento Europeo ha tramitado en los últimos 30 años casi 200 solicitudes de levantamiento de inmunidad por motivos tan variados desde multas de tráfico hasta casos de corrupción. Entre los más visibles figuran la retirada de la inmunidad de Carles Puigdemont, Toni Comín y Clara Ponsatí por su papel en el proceso independentista catalán o los casos vinculados al ‘Catargate’.
En cualquier caso, el levantamiento de inmunidad no es un veredicto de culpabilidad ni le quita a Alvise el escaño o ningún otro privilegio o derecho asociado al cargo, ya que sólo permite que la justicia le procese por el delito que figure en la solicitud que remitan las autoridades.
Es por eso que la Eurocámara deberá tramitar por separados todos los suplicatorios que le remitan los tribunales españoles y serán éstos quienes decidan si Pérez debe ser inhabilitado.