Imagen de archivo del Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel (Ciudad Real), un humedal cada vez más seco por la falta de precipitaciones y la extracción continuada de sus aguas subterráneas. EFE/ Mariano Cieza

Bruselas alerta del riesgo de desertificación en España y le pide gestionar mejor el agua

Bruselas (EuroEFE).- El agua se encuentra bajo una gran presión en la Unión Europea y los Estados deben proteger sus acuíferos, especialmente los países del sur como España, donde la escasez es más acuciante.

Así lo indican una serie de informes presentados este martes por la Comisión Europea, que recomendó a España invertir más en soluciones basadas en la naturaleza, además de mejorar la transparencia y la cooperación con Francia y Portugal.

«Hoy en España, el 74 % del territorio está en riesgo de desertificación», dijo en rueda de prensa la comisaria de Medioambiente, Jessika Roswall, en su primera gran comparecencia como responsable de esa cartera en el segundo Ejecutivo comunitario de Ursula von der Leyen.

La política cristianodemócrata sueca aseguró que todos los países tienen desafíos y agregó que «el coste de no hacer nada es demasiado alto y la situación empeoraría», pero añadió que en los países del sur de Europa la situación es más perturbadora.

«Todos tenemos que tratar el agua de una manera más política«, afirmó Roswall, preguntada en rueda de prensa por España.

La comisaria europea de Medioambiente, resiliencia del agua y economía circular, Jessika Roswall, durante una rueda de prensa este martes en Bruselas. EFE/EPA/OLIVIER HOSLET

La vicepresidenta ejecutiva de la Comisión Europea para la Transición Limpia, Justa y Competitiva, la española Teresa Ribera, señaló por su parte que aún queda «mucho por hacer para evitar la sobreexplotación, reducir la contaminación difusa, y asegurar la recuperación de los sistemas hídricos«.

«Hemos de prepararnos para inundaciones y sequías, aspectos clave en la estrategia europea para la Resiliencia Hídrica» que Bruselas presentará próximamente, concluyó Ribera.

Calidad y explotación del agua

El Ejecutivo comunitario emitió esas recomendaciones con base en un análisis de la implementación de la Directiva Marco del Agua, la Directiva sobre Inundaciones y la Directiva Marco sobre la Estrategia Marina, que muestran avances en la gestión del agua, pero subrayan que aún se necesitan esfuerzos significativos, especialmente en calidad de aguas superficiales y gestión de riesgos de inundación.

Esos análisis arrojan que solo un 39,5% de las aguas superficiales de la UE alcanzan un buen estado ecológico, y un 26,8% un buen estado químico, principalmente debido a la contaminación por mercurio y otros tóxicos.

España presenta una mejor situación en ese ámbito, y Bruselas espera que para 2027 tenga el 97,7 % de sus masas de agua en buen estado ecológico y el 98 % en buen estado químico.

En cuanto a la escasez de agua, la Comisión destaca que la extracción y sobreexplotación es un problema en España, que en líneas generales está justo por encima del umbral de explotación del 20 % que indica escasez (19,5 %) pero ese valor aumenta significativamente en regiones como Guadalquivir (48 %), Guadiana (50 %), Júcar (72 %) y Segura (100 %), que superan el umbral de riesgo severo del 40 %.

En cuanto a la distribución, la agricultura es el mayor consumidor (64 %), seguida por la generación eléctrica (19 %), uso doméstico y servicios (16 %) e industria manufacturera (1 %), con datos de 2020.

Medición inadecuada

Según el Ejecutivo comunitario, en España existe una falta de control istrativo sobre las fuentes de agua subterránea debido a derechos históricos y registros incompletos, lo que complica una gestión efectiva.

También se mide inadecuadamente el agua, pues las herramientas para hacerlo no se ha implementado de manera generalizada, y se recomienda registrar todas las extracciones y actualizar regularmente los balances de agua para controlar mejor los recursos y evaluar el impacto de las extracciones pequeñas.

La Comisión Europea quiere ahora iniciar un diálogo con los veintisiete Estados sobre la correcta implementación de la normativa europea sobre agua.

Además, Bruselas abrió este martes una consulta pública hasta el próximo 6 de marzo que servirá para construir su futura Estrategia Europea de Resiliencia Hídrica, prevista para el segundo trimestre de 2025.