Acto institucional con motivo del Día Internacional contra la Homofobia, Transfobia y Bifobia EFE/ Jero Morales

Extremadura «levanta la bandera arcoíris» por el colectivo LGTBI

Mérida (EFE).- Asociaciones, partidos e instituciones se han congregado este viernes en un acto en la Asamblea de Extremadura para «levantar la bandera arcoíris» por el colectivo LGTBI e incidir en el papel de la educación para hacer frente a los discursos de odio que buscan el retroceso.

Este 2025 se cumplen 10 años de la pionera ley extremeña que protege sus derechos y que Vox intentó derogar,

«No queremos volver a sentir miedo porque hemos salido de la oscuridad y no queremos volver a ella. Ahora más que nunca debemos defender los derechos por los que se ha luchado tanto», ha expresado Paqui Chavez.

Esta lesbiana es docente en el CEIP Santiago Apóstol de Villanueva de la Serena, desde donde enseña a sus alumnos a ser mejores personas y a «construir un mundo más justo».

De la invisibilidad a la libertad

Tras vivir durante muchos años en la «invisibilidad», con amor pero sin libertad, la democracia le permitió, con el paso de los años, ir mostrándose con naturalidad, con la cabeza alta y orgullosa, porque -enfatiza- no es más que nadie pero tampoco menos.

La docente ha trasladado su testimonio en este acto con motivo del Día Internacional contra la Homofobia, Transfobia y Bifobia, en el que ha intervenido la presidenta de la Junta, María Guardiola.

Ha estado acompañada por todos los del Consejo de Gobierno, la vicepresidenta de la Asamblea, Lara Garlito, y activistas del colectivo.

Delitos de odio

La presidenta de la Fundación Triángulo, Silvia Tostado, ha indicado que no es un día de celebración, a tenor de los alarmantes datos oficiales de delitos de odio y restricción de derechos en el mundo.

Detrás de los cuales hay «vidas rotas» o migración cuando «nadie tiene que ser perseguido por su forma de amar o de ser», ha dicho.

Pero estas cifras son solo «la punta del iceberg», pues hay muchas personas que no denuncian por «miedo» en un contexto donde, ha advertido, quienes deberían proteger como representantes de los ciudadanos no lo hacen.

Se ha referido en concreto al intento de derogar la Ley LGTBI extremeña por parte del grupo parlamentario Vox.

También ha abordado la falta de espacios seguros en el entorno familiar o en los colegios, donde todavía «a niños en edades muy tempranas se les llama mariquitas por querer jugar con muñecas».

La educación

En el ámbito educativo ha incidido la vicepresidenta de Extremadura Entiende, Sara Ramos.

A propósito del Día de las Familias el 15 de mayo y el mantenimiento en algunos centros del Día del Padre o el de la Madre, ha pedido que se atienda la diversidad familiar para no provocar situaciones de «acoso» y «sufrimiento» en los menores, tanto del colectivo como sus familiares.

Además de tener palabras para «las múltiples capas de discriminación» en el colectivo LGTBI, como las que afectan a las personas migrantes o con discapacidad intelectual, ha subrayado el valor de los «aliados» para llevar el mensaje a todos los espacios porque esto no va de etiquetas, va de derechos humanos.

«Ser aliado es mostrar el enfado cuando alguien haga un chiste del colectivo o no incomodarte cuando tu hija te pregunte que es ser lesbiana», ha señalado.

Guardiola

El acto en el que Extremadura ha levantado la bandera arcoíris por el colectivo LGTBI ha sido cerrado con la intervención de Guardiola, quien ha defendido «la libertad sin matices, sin condiciones ni tutelas».

Ha remarcado que en Extremadura «no hay espacio para el odio» ni se va a permitir «nunca un paso atrás en la defensa del colectivo.

Guardiola ha recordado que hace 10 años se aprobó por unanimidad, durante un gobierno del PP, una ley pionera que sitúa a Extremadura a la vanguardia del país y que es fruto del compromiso de las asociaciones y el activismo.

Al mismo tiempo, ha resaltado que los derechos de las personas LGTBI no son patrimonio de ninguna ideología, no deben usarse como arma arrojadiza, porque «la igualdad no debe ser jamás objeto de disputa ni moneda de cambio en el tablero partidista».

Frente a la LGTBIfobia que sigue presente en las calles, aulas o en algunas familias, la Junta no bajará la guardia y reforzará los recursos de atención a las víctimas, con políticas específicas en el medio rural y un protocolo integral que implique a educación, sanidad y servicios sociales.

Sin consenso político

La conmemoración no ha contado este año ni con declaración institucional, por la negativa de Vox, ni con un manifiesto alternativo de PP, PSOE y Unidas, como ya ocurrió en el último 8M.

Hace un año, ante la imposibilidad de consensuar una declaración conjunta por parte de todo el arco parlamentario, las portavoces de Igualdad de PP (Teresa Tortonda), PSOE (Soraya Vega) y Unidas (Nerea Fernández) sí leyeron el manifiesto contra la LGTBIfobia acordado por estos tres grupos.

Al terminar el acto el PP ha leído el manifiesto que había propuesto.