Logroño (EFE).- El Ayuntamiento de Logroño prevé que el catálogo de bienes protegidos en su Plan General Municipal pase de los 150 que hay en la actualidad a unos 600 protegibles o con algún tipo de observación.
Así lo ha explicado el alcalde de Logroño, Conrado Escobar, en una rueda informativa, en la que se ha referido al inventario de Bienes Protegidos, que forma parte de los documentos de la revisión del Plan General Municipal.
Ha enmarcado este catálogo en todo el proceso de revisión del Plan General Municipal, que data de 1985 y al que se desea incorporar todas las sensibilidades en torno al patrimonio, a la arquitectura y a otras cuestiones.
Estos elementos van desde los patrimoniales que están calificados como bienes de interés hasta los conjuntos históricos artísticos, entre los que Escobar ha citado, como ejemplo, el recorrido en la ciudad del Camino de Santiago.

El monumento a Espartero
Se incorporan al catálogo «de forma objetiva» edificios que no estaban, como el Museo de La Rioja, el Archivo Histórico, la muralla y la Puerta del Revellín.
Además, hay otros elementos «que merecen protección o una reflexión por su singularidad», como los monumentos a Espartero y al Fuero de Logroño, la Fuente de Murrieta; también grupos escultóricos o «elementos singulares por su valor emocional», como los cementerios.
El alcalde ha incidido en la idea de «proteger en conjunto» el paisaje urbano de Logroño, con calles como las de Muro de Cervantes, Muro del Carmen y el conjunto de las Casas Baratas.
Ha recalcado que en 1985 «la percepción social era otra y ahora la exigencia de protección trasciende a lo arquitectónico y va a lo emocional».
Por eso, tras un debate sereno, desea que en el catálogo «no se nos olvide nada, con independencia de la protección que se le dé, porque habrá algunos bienes que se limiten a tener una ficha explicativa».