Sergio Jiménez Foronda | Calahorra, (EFE).- Unos 250 vecinos de Calahorra participaron en Jueves Santo en las calles del municipio para revivir la Pasión de Cristo en una representación “especial” dentro de las que se celebran en el norte de España en Semana Santa porque se desarrolla en una sola noche.
Así lo ha afirmado a EFE la presidenta de la Agrupación Cultural Grupo Paso Viviente de Calahorra, Reyes Pérez, quien ha explicado que esta obra recoge “todas las escenas” de la Pasión de Cristo, desde la entrada en Jerusalén, la última cena y la oración en el huerto hasta la crucifixión y la resurrección, que es el final.
Pérez ha señalado que “es una escenificación especial porque casi todas las del norte del país se dividen en varios días, de forma que cada jornada hacen alguna escena, y la mayoría son diurnas”.
Esta tradición, ha proseguido, comenzó en 1982 durante un carnaval con “una pequeña representación de una crucifixión, por así decirlo, que duraba muy poco, mientras que ahora es un espectáculo de dos horas de extensión prácticamente”.
“Es algo que gustó a Calahorra y que su población decidió apoyar y decir ‘pues vamos a hacer un poquito más, que está bien’, tras lo que se sumó más gente” a la representación y creció hasta lo que es en la actualidad, ha precisado Pérez, quien ha apuntado que la Semana Santa calagurritana es Fiesta de Interés Turístico Nacional.
Ha destacado que, “con los años, se han cambiado los escenarios y se han mejorado las luces, el sonido y el atrezo, que siempre van evolucionando, aunque la historia es la que es y no se puede cambiar”.
Apoyo de todo el pueblo “A pesar de que la base de la representación no la podemos modificar, lo que se va haciendo, sobre todo, es intentar hacer más bonitos, más adecuados y más rigurosos los escenarios” que se pueden ver en este “acto multitudinario” en el que “la gente nos muestra su apoyo y su cariño”, ha señalado.
Pérez ha resaltado que el equipo que trabaja para dar vida a la Pasión de Cristo está “muy agradecido del cariño, acompañamiento y respeto de la gente”, que se nota, de forma especial, en como respeta los escenarios y los silencios entre escenas, por lo que es “muy emocionante comprobar que los espectadores entienden eso”.

Junto a las 250 personas asociadas a la Agrupación Cultural Grupo Paso Viviente de Calahorra, que participan el día de esta representación, se encuentran todos aquellos calagurritanos que se quieren unir y acompañar la historia vestidos de época, y que “son cada vez más”, ha continuado.
Para todos los públicos
“Nosotros estamos contando una historia religiosa del catolicismo, pero, realmente, es una obra de teatro a la que puede asistir cualquier tipo de público y no hace falta ser creyente”, ha asegurado.
Ha especificado que “el que sea católico vivirá la representación desde dentro y le emocionará de una manera, mientras que al que solo venga a verlo como una obra de teatro le emocionará de otra, pero es totalmente abierta a todos los públicos”.
Además, el Paso Viviente es “un acto que trae a muchísima gente a Calahorra y, al final, cuando tú vas a un sitio, como poco echarás gasolina y te tomarás un café, es decir, todo lo que trae turismo, trae dinero a la ciudad”, ha indicado respecto a la repercusión económica de esta representación.