La Paz (EFE).- El expresidente de Bolivia Evo Morales (2006-2019) afirmó este lunes que la CIA (Agencia Central de Inteligencia en español) de Estados Unidos «opera» en el país andino para capturarlo, al cumplirse tres meses de un supuesto atentado contra su vida que habría ocurrido en octubre de 2024 en el Trópico de Cochabamba.
Morales denunció el 27 de octubre de 2024 que fue víctima de un «ataque armado» cuando se movilizaba por la carretera, responsabilizó del hecho al presidente Luis Arce y después afirmó que el Gobierno de Estados Unidos estuvo involucrado en el «atentado».
El ministro de Gobierno (Interior), Eduardo del Castillo, acusó días después del supuesto atentado al expresidente de disparar con arma de fuego a varios policías y de herir a uno cuando hacían un control antidrogas.
Policías encapuchados
Los vehículos en los que iban los policías se trasladaron al cuartel de la Novena División del Ejército para evacuar al herido en un helicóptero, según informó el Gobierno en su momento.
Sin embargo, Morales afirmó que los policías involucrados en el supuesto ataque no llevaban uniforme y estaban encapuchados, y que según algunas fotografías que él vio había civiles durante la evacuación del herido.
El expresidente cuestionó este lunes que durante el operativo realizado supuestamente para «matarlo» hubo extranjeros vestidos de civiles que utilizaron el helicóptero de las Fuerzas Armadas de Bolivia.

«(Vean) cómo extranjeros con manga corta, mochilas, van subiendo al helicóptero y cuando llegan a Santa Cruz (se los ve) armados», dijo Morales en una entrevista con la radio Kawsachun Coca, medio afín al expresidente.
Evo Morales contó que luego se aron con él algunos militares para «contarle» que la CIA estuvo en ese operativo.
La acusación de Evo Morales sobre la CIA
«Yo pregunté y me dijeron que la Policía contrató a un colombiano para que pueda pilotear un helicóptero, la misma gente del Gobierno me informó que ese colombiano es de la CIA, eso me sorprende, y pregunté a militares y confirmado, es de la CIA», dijo Evo Morales.
Según Morales, en Bolivia también operan del grupo de élite SWAT (Armas y Tácticas Especiales en español) de Estados Unidos para capturarlo.
«SWAT está operando, según información, un grupo de élite, esos extranjeros en la Novena División (del Ejército situada en el Trópico) por favor», señaló Evo.
De acuerdo con Morales, el operativo se preparó dos semanas antes «con bolivianos y extranjeros» en el Trópico de Cochabamba, su bastión político y sindical, en donde permanece desde octubre protegido por sus seguidores que lo resguardan ante una orden de aprehensión en su contra por un caso de trata agravada de personas que lo involucra.
Pide investigación
Según el exmandatario, los extranjeros siguen en territorio boliviano y pidió a los organismos internacionales que investiguen el «atentado» y la presencia de militares «del imperio».
Morales dijo que la «persecución política» en su contra comenzó en 2021 cuando se enteró que el Gobierno de Arce preparaba una operación llamada el ´Plan Negro´ contra él, en el que estaban involucrados autoridades del Ejecutivo, militares y policías.
Señaló también que desde ese año Arce ya mostraba acercamientos con Estados Unidos y esa «relación se confirmó» en el «ataque armado» que sufrió en octubre del año pasado.
Arce y Morales están distanciados desde 2021, por diferencias en el manejo del oficialista MAS y el Ejecutivo boliviano.
Seguidores cavan pozos para impedir que aeronaves aterricen
Además, seguidores de Morales dijeron que cavan pozos en el Trópico de Cochabamba, bastión político de su líder, para «impedir que avionetas y helicópteros aterricen» en esa zona con el fin de capturarlo por un caso de trata de personas.
«Si se está cavando en el Trópico de Cochabamba es para que no vayan a aterrizar avionetas, helicópteros en ese sector porque sabemos que tiene un plan ya hecho el ministro de Gobierno (Interior) para poder intervenir y enlutar a los bolivianos», dijo a medios el dirigente del Movimiento al Socialismo (MAS) Franco García, quien es afín a Morales.
Los seguidores del continúan una «vigilia» en los alrededores de la localidad de Lauca Ñ, donde Morales permanece desde octubre de 2024, cuando se abrió una investigación penal en su contra por el delito de trata agravada de personas contra una menor con quien habría tenido un hijo en 2016, cuando él era presidente.