El secretario general de la ONU, António Guterres, en una fotografía de archivo. EFE/Mohammad Ali

La ONU ve «inaceptable que los palestinos se jueguen la vida por la comida»

Naciones Unidas (EFE).- El secretario general de la ONU, António Guterres, consideró este lunes que es «inaceptable que los palestinos se jueguen la vida por la comida» en referencia a la matanza de ayer de 31 gazatíes por disparos en las cercanías de un punto de distribución de comida en Rafah.

Guterres, que se dijo «horrorizado» por esos hechos, exigió «una investigación inmediata e independiente», que debe terminar en que «los perpetradores rindan cuentas».

Aunque no apuntó directamente a Israel como el origen del ataque, el secretario general sí recordó que ese Estado «tiene obligaciones claras bajo la ley internacional para permitir y facilitar la ayuda humanitaria», y en ese sentido, «restaurar de inmediato la entrada sin trabas de asistencia a gran escala para responder a las enormes necesidades en Gaza«.

Desencuentros entre Israel y la ONU por la entrega de comida para palestinos

La ONU «debe tener permitido trabajar en seguridad bajo condiciones que respeten los principios humanitarios», concluyó el político portugués.

La ONU ve "inaceptable que los palestinos se jueguen la vida por la comida"
Palestinos piden comida en un centro de ayuda en la Franja de Gaza, el 30 de mayo de 2025. EFE/Haitham Imad

La distribución de comida y asistencia se ha convertido en el último punto de fricción entre Israel y las agencias de la ONU, que exigen encaminar la asistencia según lo principios de imparcialidad y neutralidad y con control total del proceso.

Israel, por su parte, pone constantes trabas y exigencias burocráticas a la ONU que ralentizan las entregas, a veces durante días.

En paralelo, Israel ha promovido a una Fundación Humanitaria para Gaza (GHF), de carácter privado y creada en Estados Unidos, que durante la pasada semana organizó en la Franja varios puntos de distribución de ayuda que han acabado en numerosas ocasiones en escenas de caos, pánico y violencia, como la de ayer en Rafah.