Oviedo (EFE).- La industria asturiana aumentó su producción en noviembre un 2,2 por ciento en tasa interanual, con lo que ha encadenado ocho meses al alza, según refleja el índice publicado por la Sociedad Asturiana de Estudios Económicos e Industriales (Sadei).
En el acumulado de enero a noviembre, la industria asturiana incrementó su producción una media del 1,3 por ciento en comparación con el mismo periodo del año anterior.
El informe de Sadei explica que el avance de noviembre se sustentó en el buen comportamiento de la metalurgia, la rama de actividad con mayor peso en la industria regional, «a pesar de la amenaza que supone en el corto plazo la caída de la demanda de determinados sectores clave para ella, como el del automóvil».
También destacó el impulso de la industria transformadora de los metales gracias a la construcción naval, la industria armamentística y la fabricación de estructuras para generar energía renovable, así como de la industria química.
Por el contrario, la generación de energía mantuvo «la larga trayectoria decreciente y no parece encontrar un punto de inflexión», a la vez que se hubo retrocesos en la fabricación de productos metálicos y en otras industrias manufactureras.
Respecto a las perspectivas de la industria, Sadei destaca las actividades de alimentación y bebidas, que verán ampliada su producción con nuevas líneas de productos en factorías ya existentes y con la reapertura de la antigua planta de Danone en Salas por parte de la empresa Royal A-ware, así como el avance de diversos proyectos de energías verdes.
Evolución por ramas de actividad
Por ramas de actividad, el mayor aumento interanual de la producción en noviembre correspondió a la ‘Industria transformadora de los metales’ y a la ‘Industria química’, con un 14,8 y un 14,5 por ciento, respectivamente.
Además, la producción subió en ‘Metalurgia’, un 4,5 por ciento; ‘Industrias extractivas’, un 3,2 por ciento, y ‘Alimentación, bebidas y tabaco’, un 2,9 por ciento.
En cambio, bajó la producción de las ramas de ‘Fabricación de productos metálicos’, un 13,9 por ciento; ‘Otras industrias manufactureras’, un 11,9 por ciento; ‘Energía eléctrica, gas y agua’, un 1,9 por ciento, y ‘Otros productos minerales no metálicos’, un 0,5 por ciento. EFE